En este país donde todo resulta un chiste, donde todo es tan irreal, donde se dice una cosa pero se hace otra, donde se cree en Dios pero se le reza al diablo, donde los pobres quieren ser más pobres, donde las víctimas están felices de serlo, donde, en resumidas cuentas, todo es al revés, este interrogante esta ahora abierto; y también muchos más, por ejemplo: qué podemos hacer?, que debemos hacer?, para donde debemos ir?, en fin, hay tanta confusión en el aire que ya no se qué pensar; será que Uribe no era realmente nuestro mesías?, y nuestro mesías efectivamente es Santos?; será que el fin si justifica los medios?, y yo pienso que no y soy parte de los que estamos equivocados?; será que aquí no ha muerto nadie por la violencia de estado?, y la sangre que he visto correr es una mancha roja en mis ojos?; será que el hambre que he visto en mi gente no existe?, y la mano tendida de mi paisano no está pidiendo sino que está dando?; será que la gente que he visto morir sin atención médica no ha muerto?, o estamos muertos todos?; cuando vi blandir la motosierra estuve soñando?, y los campesinos masacrados que vi?, y los desarraigados?; mierda, esto no es lo que dijimos que queríamos hacer cuando éramos niños. En este momento hay dos caminos, el de empezar a reconstruir ya esta porquería de patria que nos están dejando, o el de Fernando Vallejo.
Todo aquí huele a muerte…
Todo aquí huele a muerte…
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